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Bajo la sombra de la censura

"No se trata de una censura, sino que simplemente no iban a tocar temas de análisis político, sino a confrontar a una empresa”, afirma Miguel González, director de mercadeo de Radio Nuevo Mundo.
“La política no es ajena al uso que una marca, cualquiera que ésta sea, haga del país. No estamos hablando aquí de tachuelas, ni de lencería fina, ni de goma de mascar, sino de la identidad nacional a través de una campaña que utiliza bienes públicos”, argumenta Andrés Zepeda, panelista de IG.
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Bajo la sombra de la censura

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Hace casi ya dos semanas, integrantes del Grupo Intergeneracional (GI) se preparaban para otro viernes de su programa en Radio Nuevo Mundo (RNM). Esta vez planeaban cuestionar las campañas publicitarias que, a través de determinada marca, pretenden promover identidad o valores. Su punto de partida era la última campaña de Pepsi y Ricardo Arjona: Guatemorfosis. Sin embargo, el programa no salió al aire: GI recibió una llamada de la estación pidiéndoles cambiar el tema. GI afirma que la radio culpó a Pepsi y la radio asegura que fue una decisión preventiva, sin intervención de la embotelladora. Aquí un relato de los hechos.

El espacio radial, cedido por la radio a Grupo Intergeneracional, un colectivo de reflexión intelectual, hace casi dos años, pretendía “reflexionar críticamente sobre la publicidad que se hace pasar por campañas de promoción de bienes públicos, pero trasladan al individuo la responsabilidad de los problemas sociales”, explicó el GI en un comunicado oficial. “¿Guatemorfosis o Guatepsicosis?”, se titulaba el programa fallido.

La discusión, dirigida a desmitificar las campañas positivistas que pretenden incidir en la opinión pública, según GI, superaba el límite editorial del programa. Es “exclusivo para tratar temas políticos”, dijo Miguel González, director de mercadeo de Radio Nuevo Mundo. El directivo explica que se le cedió el espacio a GI para que discutieran temas políticos, “pero no para confrontar empresas, sea Pepsi o cualquier otra. No fue Pepsi, sino fuimos nosotros –Radio Nuevo Mundo- los que decidimos que no saliera, porque se salía de los temas del programa y no queremos vernos metidos en confrontaciones de terceros”.

Grupo Intergeneracional, en su comunicado, apunta a que existieron presiones por parte de la agencia publicitaria encargada de la campaña de Guatemorfosis. Felipe Morales, director de cuentas de El Taier, la agencia publicitaria creadora de la campaña, negó relación alguna con el hecho.

“No es cierto. No hemos llamado”, aseguró Morales. Agregó que una solicitud para privar la libertad de expresión de un programa radial, “iría en contra de los valores” que promueve la campaña, basada en una actitud positiva y que tiene como estandarte al cantautor Ricardo Arjona.

A su vez, Diana Orellana, del área de mercadeo de Cabcorp, embotelladora de Pepsi en Centroamérica, dijo que están investigando la situación. Aunque no han contactado con la radio: “No sabemos qué pasó”, afirma la encargada de mercadeo.  Orellana argumenta que Pepsi se enteró del programa por su monitoreo radial, pero que su ética le impediría atentar contra la libertad de expresión.

¿ Pepsi presionó a Nuevo Mundo o Nuevo Mundo lo decidió?

Andrés Zepeda, Gabriela Carrera y Heini Villela Schneebeli, los panelistas que abordarían la discusión el viernes, fueron informados del cambio de planes por Mario Roberto Morales y Fernando Espinoza –también miembros del GI- tras una comunicación de Marvin Robledo, de RNM.

“El viernes recibí un mail, en donde se nos pedía cambiar el tema (del programa) porque la agencia había llamado preocupada”, relata Morales. Robledo, que llamó de parte del dueño de la radioemisora, Alfredo González, pidió que cambiaran el tema ya que los encargados de la campaña Guatemorfosis manifestaron su consternación ante el intento de demeritar el proyecto al relacionarlo con la segunda parte del título: “Guatepsicosis”.

El propósito del programa, explica Morales, era la deconstrucción de la campaña para comprender lo que dice.  Así como lo menciona Grupo Intergeneracional en su comunicado en el que asegura que “ni Pepsi como marca, ni Ricardo Arjona como cantautor, ni Radio Nuevo Mundo como emisora mediática eran el tema central de nuestra discusión: la psicosis a la que hacíamos referencia tenía que ver con el mecanismo esquizoide de endilgar al grueso de la sociedad, mediante eslóganes manipuladores y falsos como El cambio solo empieza si vos cambiás, una responsabilidad que en todo caso le corresponde a ciertos grupos y actores específicos”.

GI se negó a modificar la temática del programa y no alcanzaron un acuerdo con Morales y Robledo, de RNM. Mientras negociaban, GI hizo pública la situación en las redes sociales y, como consecuencia el programa fue suspendido temporalmente por el directivo. Los directivos de la radio citaron a una reunión al Grupo Intergeneracional, aseguran en RNM, pero la cita no se realizará porque el colectivo lo considera una mordaza.

Miguel González, de la radio, sostiene que no se trató de una censura: “Si tenemos un espacio para boleros, queremos que se use para boleros y no para análisis político. Si tenemos un espacio para análisis político, no queremos que se use para atacar a empresas. Pepsi no es anunciante en Nuevo Mundo (aunque sí en otras emisoras de la corporación) y hubiéramos hecho lo mismo si hubiera sido una empresa pequeña”.

“Ustedes mismos (Plaza Pública) han estado en nuestros micrófonos y han visto que no censuramos las llamadas al aire, ni tampoco a nuestros periodistas, que buscan un balance, pero éste era un programa de terceros. No se trata de una censura, sino que simplemente no iban a tocar temas de análisis político, sino a confrontar a una empresa”, insiste González.

Zepeda, uno de los panelistas de GI, lo contradice. “La política no es ajena al uso que una marca, cualquiera que ésta sea, haga del país. No estamos hablando aquí de tachuelas, ni de lencería fina, ni de goma de mascar, sino de la identidad nacional a través de una campaña que utiliza bienes públicos”, argumenta Zepeda, que recuerda que en otros programas han hablado de grandes corporaciones.

“Por otro lado, tampoco es la primera vez que hacemos mención de empresas al abordar temas de debate político. Lo hemos hecho antes con Goldcorp al hablar de la minería, con Solel Boneh al hablar de la Franja Transversal del Norte y de Zeta Gas al hablar del riesgo que como área protegida corre la reserva natural ubicada en Punta de Manabique”, declara Zepeda.

¿Censura empresarial?

Grupo Intergeneracional sostiene que la censura ocurrió por una llamada de la Pepsi, porque así les comunicó en una primera instancia Radio Nuevo Mundo. Miguel González, de la radio, lo desmiente y asegura que fue una decisión de la empresa radial. Pepsi también niega haber llamado a la radio. GI no se lo cree. Lo que es un hecho, es que el programa radial no se transmitió.

"A que no saben? los de la Pepsi llamaron a la radio. Parece que no les gusta nuestro nuestro enfoque. se nos pidió que cambiáramos de tema. Esto huele a censura comercial. ¿Será que el programa va a transmitirse? Sintonice y compruébelo usted mismo", se preguntaba el GI el viernes pasado con una mezcla de optimismo y cinismo. La frase pudo arruinar cualquier negociación con el medio. Pero Grupo Intergeneracional, como afirma en su comunicado se niega a cualquier forma de censura y defiende “el derecho de los ciudadanos a debatir e informarse escuchando una pluralidad de voces que no deberían responder a los dictados corporativos ni a sus agendas comerciales”.

A pesar de un relativo barullo en las redes sociales, ni Pepsi, ni la agencia el Taier han hablado del tema. Ese mismo viernes, en que GI publicaba su indignación en facebook generando una serie de comentarios de apoyo; en el perfil de Pepsi se realizaba un concurso para regalar entradas al próximo concierto de Arjona. Durante horas, Pepsi publicó mensajes de tolerancia con todas las críticas y visiones que se quisieran expresar en su muro acerca de la libertad de expresión y el futuro personal y de Guatemala. Un día después habían sido eliminados sistemáticamente todos los mensajes que hacían referencia al problema y a la divergencia de opiniones.

Hasta ahora, Pepsi y su agencia publicitaria niegan cualquier interferencia con la libertad de expresión, Radio Nuevo Mundo insiste en su derecho a establecer límites editoriales. Y, desde la semana pasada, Grupo Intergeneracional transmite en internet.

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