Diamantes rotos y los Rolling Stones

Y creo que este debe haber sido uno de los despertares más dulces que haya tenido en mucho tiempo.

Los Rolling Stones han presentado esta semana detalles de lo que será su nuevo álbum, Hackney Diamonds. Lo han hecho en un teatro repleto de periodistas en Londres, desplegando una energía que solo puede encontrarse en estos ancianos rockeros, que afirman que han hecho un álbum que realmente les gusta, y lo han hecho justamente por esa razón.

Han pasado 18 años desde que se publicó A Bigger Bang (2005), el último álbum que contenía la firma Jagger-Richards como autores de las canciones. A la mitad del camino está el brillante Blue and Lonesome (2016) que contiene covers de venerables blues, y sobre el cual escribí alguna maquila antes.

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Rafa de Miguel, en su crónica en El País, destaca que el título del álbum es un juego de palabras en la jerga londinense de los años 60, para referirse a los cristales esparcidos por el piso luego de que alguien quebrará una ventana para robar, y como se lanzó una campaña publicitaría alrededor de este tema, incluyendo un supuesto taller de reparación de cristales, que cuenta con su propia página de Twitter, @hackneydiamonds, que te reconducirá directamente al sitio web de los Rolling Stones.

We Were Lazy!, se titula el artículo de Ben Beaumont-Thomas en The Guardian, que destaca que pesa un embargo sobre las crónicas del álbum, hasta su lanzamiento oficial el próximo 20 de octubre, pero que The Guardian obtuvo un «early listening», sobre el cual abunda en algunos detalles sobre las colaboraciones con otros músicos.

En el álbum han incluido dos canciones grabadas mientras Charly Watts aún vivía, pero es Steve Jordan quien se encarga de la batería en la mayoría de los temas. Y los Stones, que no se han detenido pese a la pérdida de Watts –estaban de gira el año pasado, tuvieron palabras para reconocer el legado de Watts, sin restarle importancia a la contribución de Jordan–.

Ya más tarde, puedo contagiarme de la misma alegría que Sydney Sweeney en el video de Angry, mientras al ritmo del riff inconfundible de la banda más longeva en el mundo se acompaña de líricas bien estructuradas, que relata la relación con una amante que se va extinguiendo: It hasn't rained in a month, the river's run dry/We haven't made love and I wanna know why/ Why you angry with me?

Quiero creer que este no será el último álbum de los Rolling Stones, y tengo una particular curiosidad por escuchar a Keith Richards cantar. A finales de octubre, seguramente despertaré otra vez en un semáforo escuchando Tell me straight, espero que otra vez con una sonrisa, y sin la urgencia de hacer un giro en «u».