[field_foto_galeria_portada]
Ir

Encuestas, tendencias imprecisas

Hace ocho años, por ejemplo, la encuesta de Prensa Libre, realizada por Vox Latina, que ahora trabaja para Siglo 21, le otorgaba a Berger y Colom 21 y 16 puntos de ventaja respecto de Ríos Montt, y en las elecciones la diferencia fue únicamente de 15 y 7 puntos.
Al principio de la campaña era una incógnita si participarían Sandra Torres, Harold Caballeros, Álvaro Arzú o su esposa Patricia, Eduardo Suger y Zury Ríos.
Tipo de Nota: 
Información
Palabras clave

Encuestas, tendencias imprecisas

Historia completa Temas clave

Publicadas con orgullo por los medios, recibidas con rencor por los candidatos que aparecen a la zaga y con escepticismo pero reverencia por el electorado, las encuestas han sido más volátiles en este año electoral que en los anteriores por lo atípico del proceso. Eso sí, ninguna menciona que hace cuatro y hace ocho años casi todas fallaron en sus vaticinios de primera vuelta más allá de su margen de error, entre cinco y diez puntos.

Las empresas encuestadoras y los medios no tuvieron fácil las realización de los primeros sondeos a inicios del año. Era una incógnita si participarían Sandra Torres, Harold Caballeros, Álvaro Arzú o su esposa Patricia, Eduardo Suger y Zury Ríos. Todos eran colocados cerca del artículo 186 de la Constitución que establece las prohibiciones para optar al cargo de Presidente de la República. Arzú por haber sido presidente, Sandra Torres por haber estado casada con el actual Presidente, Ríos por ser hija de exgobernante, Caballeros por haber sido pastor, Suger por haber nacido en Suiza de madre guatemalteca y Escobar de Arzú por haber nacido en El Salvador.

Al final, tres participaron sin problemas y tres se quedaron en el camino. Zury Ríos, del FRG, fue la primera en tirar la toalla abrumada por la distancia entre el financiamiento que pudo recolectar y el que recibieron otros candidatos. Álvaro Arzú optó por designar a su mujer cuando el Congreso rechazó consultar a la Corte de Constitucionalidad sobre las posibilidades de que le permitieran reelegirse, por lo textual de la prohibición, y porque en sus cálculos no le alcanzarían los votos en la Corte de Constitucionalidad. Patricia Escobar de Arzú nació en El Salvador, pero los centroamericanos que se nacionalicen son considerados guatemaltecos de origen, es decir, de nacimiento. Ni Ríos ni Arzú parecían con posibilidades de colarse en la segunda vuelta o si quiera en los primeros cuatro lugares. Y De Arzú roza el 3 por ciento de las preferencias. Suger y Caballeros lo lograron y disputan el segundo y tercer lugar.

En estos escenarios cambiantes, en una candidatura casi anecdótica, una semana antes del cierre de inscripciones presidenciales, el 11 de julio, un juzgado liberó a Alejandro Giammattei –acusado de participar en las ejecuciones extrajudiciales en Pavón en 2006– y el partido Casa le otorgó la candidatura presidencial para intentar sobrevivir como agrupación política. Tarea que tendrán difícil si aciertan todas las encuestas que sitúan a Giammattei debajo del 2 por ciento de simpatías.

Algunos activistas de derechos humanos aseguraban que impedirían la candidatura de Otto Pérez por el asesinato del guerrillero Efraín Bámaca en 1992, pero la acusación no prosperó.

Tercer y segundo lugar vacantes

Los escenarios y los actores fueron cambiando a lo largo de estos últimos seis meses. Harold Caballeros estuvo en un impasse durante cuatro de los cinco meses de la campaña mientras el TSE y las cortes decidían si le aplicaba la prohibición constitucional y durante el año pasó de hacer equipo con Adela Camacho de Torrebiarte (ADN) y Quique Godoy (candidato a alcalde metropolitano ex unionista) a aliarse electoralmente con Encuentro por Guatemala de la diputada Nineth Montenegro. En una decisión dividida de la Corte Suprema de Justicia, de ocho magistrados contra cinco en contra, le fue permitido participar pese a haber sido ministro de culto. La Corte de Constitucionalidad no aceptó una apelación para decidir sobre el tema por un problema de forma que ésta presentaba.

Esta suspensión temporal hizo que Caballeros no continuara creciendo, pues llegó a disputar el tercer lugar con 7.6 por ciento en el mes de con Eduardo Suger, de Creo, y Manuel Baldizón, de Líder, y bajó alrededor del 4 por ciento para disputar el cuarto lugar este domingo 11 de septiembre.

De Torrebiarte participa como candidata presidencial con un partido nuevo, ADN, y una campaña de recursos limitados, y disputa el octavo lugar, de diez candidatos.

El caso más dramático del proceso electoral, sin embargo, fue la caída de la precandidata oficialista, de la coalición UNE-GANA, Sandra Torres. Llegó a situarse en un sólido segundo lugar con más de 20 por ciento de la intención de voto, según las encuestas. Hubiera sido una proeza colarse en segunda vuelta, tomando en cuenta que el único partido oficial en conseguirlo en 25 años de democracia ha sido el PAN de Álvaro Arzú y Óscar Berger, cuando éste último en 1999 llegó a segunda vuelta contra Alfonso Portillo, del FRG.

En cambio, la decisión de la Corte de Constitucionalidad de denegarle la inscripción como candidata por haber estado casada con el presidente Álvaro Colom durante la mayor parte de su mandato, dejó por primera vez al partido oficial sin candidato a la Presidencia.  

Quien parece haber recogido la mayor parte del voto sandrista, según las encuestas, es Manuel Baldizón, quien pasó de tener un 4.7 por ciento en julio hasta un 10.7 por ciento en agosto y crecer hasta un segundo lugar entre 18 y 26 por ciento en septiembre, según distintas encuestas. Eduardo Suger, en cambio, pudo crecer menos, del 7 a entre 12 y 22 por ciento, según las encuestas.

Fotografías, pero borrosas

Los técnicos de las encuestas recuerdan que son fotografías de la intención de voto, que reflejan un momento preciso y pueden cambiar en cualquier momento. Así también los mismos encuestados responden que las encuestas influyen en su decisión electoral. Estudios y politólogos deducen que se debe a que un gran porcentaje de los ciudadanos prefiere el voto útil, es decir, votar por alguien que tiene posibilidades de ganar. En las últimas dos contiendas, los tres candidatos con más votos sumaron el 68 por ciento de los votos en 2003 (Óscar Berger, Álvaro Colom y Efraín Ríos Montt) y el 80 por ciento en 2007 (Álvaro Colom, Otto Pérez Molina y Alejandro Giammattei).

Todas las encuestas pronosticaron que éste sería el orden el que quedarían en la carrera electoral. No obstante, fallaron severamente en los porcentajes. Algo que da combustible a quienes sostienen que hay una manipulación para favorecer a ciertos candidatos. Suger, por ejemplo, zarandeó un ejemplar de Prensa Libre durante un foro de Guatevisión (propiedad de Prensa Libre) acusándolos de manipular las encuestas para favorecer a Baldizón.

Suger olvidó mencionar que Prensa Libre ha sido poco certera en sus encuestas. Hace ocho años, por ejemplo, la encuesta de Prensa Libre, realizada por Vox Latina, que ahora trabaja para Siglo 21, le otorgaba a Berger y Colom 21 y 16 puntos de ventaja respecto de Ríos Montt, y en las elecciones la diferencia fue únicamente de 15 y 7 puntos, más allá del margen de error que ofrecen del 3 por ciento.

Durante la segunda vuelta de 2003, miembros del equipo de Berger reconocieron a reporteros que en sus propias encuestas, durante varias semanas fueron superados por Colom y al final lograron rebasarlo.

Hace cuatro años, las encuestas volvieron a fallar en la primera vuelta en cuanto a la precisión de los porcentajes. La que más cerca estuvo fue la de Borge y Asociados para elPeriódico, que pronosticó una ventaja de Colom sobre Pérez Molina de 5 puntos y al final fue de 3, pero le otorgó a Giammattei, el tercero, 7 puntos menos de lo que obtuvo.

Prensa Libre y Vox Latina fueron los que fallaron más estrepitosamente. Le dieron 6 puntos menos a Colom y a Pérez Molina y 10 puntos menos a Giammattei. Así, la ventaja que le daban al candidato del PP sobre el de la Gana no resultó de 10 puntos sino de 6.

 

En la segunda vuelta de 2007, Prensa Libre y Siglo 21 fallaron en vaticinar que Pérez Molina vencería y sólo la encuesta de elPeriódico acertó que Colom sería el Presidente.

Para este 11 de septiembre, a la luz de las últimas dos experiencias, probablemente vaticinarán el orden en el que quedarán los candidatos; pero los porcentajes y las ventajas de uno sobre otro serán una incógnita hasta la medianoche del domingo.

Autor
Autor