La candidata presidencial de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), Sandra Torres, durante su participación en un foro presidencial organizado por Prensa Libre el pasado 5 de octubre, aseguró que “para combatir la desnutrición en Guatemala mínimo se necesita una inversión de alrededor de Q7.000 millones”.
“Más allá de programas sociales, nosotras estamos proponiendo una política social que incluya un enfoque entre salud y educación, porque no podemos ver el tema de educación aislado del problema de salud, hambre y de la productividad”, agregó Torres respecto a las medidas que previstas en su plan de gobierno. La candidata no precisó durante el foro la fuente de la cifra señalada, y su portavoz no respondió las llamadas de Plaza Pública para precisar la misma.
La cifra señalada por Torres es “sin pruebas”, debido a que en Guatemala no existen estimaciones exactas del costo que implicaría el combate de la desnutrición en el país. No obstante, el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), en el informe Protegiendo la nueva cosecha: Un análisis del costo de erradicar el hambre en Guatemala 2012-2021, en el cual se propuso de manera cuantificable el tiempo y las medidas que permitirían disminuir los indicadores de desnutrición a nivel nacional, entre los años 2012 y 2021.
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En este documento se evaluaron las causas y las condiciones de vida que fomentan este fenómeno y se indicó que para combatirlo de manera efectiva era necesario aumentar los recursos destinados al combate de la desnutrición, para que estos permitan mejorar la cobertura y la calidad de los servicios de salud; implementar de manera rápida un programa de Hogares Comunitarios; avanzar en los programas de agua potable y saneamiento ambiental; mejorar el presupuesto para alimentación escolar y establecer un programa de microcréditos para las familias beneficiarias de dichas intervenciones, como medidas fundamentales. Según ICEFI, el costo de estas intervenciones para erradicar la desnutrición sería, en principio, de Q2,000 millones en el 2012, y aumentaría de manera progresiva a Q14,000 millones para el 2021, cifra que corresponde al 1.8% del PIB.
Según Pedro Prado, investigador de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES), es arriesgado señalar una cifra exacta para el costo mínimo necesario para el problema de la desnutrición. No obstante, afirma que “considerando que el problema tiene que ver con variables como la disponibilidad de alimentos, el acceso y el consumo de los mismos, probablemente el costo estimado sería similar a la cifra brindada por la candidata”.
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