Hace dos semanas hubo otra acción pública en esa línea. Con la sutileza de elefante en cristalería, se trató de una que urdieron conjuntamente, me parece, la Cámara del Agro, periodistas de extrema derecha y Anabella de León, fundadora del Partido Patriota, exdiputada, Registradora General de la Propiedad, y a quien le traslucen sus ganas por ser la rival de Claudia Paz y Paz en la contienda de 2015 por el MP. Esto, claro, si Paz y Paz decide intentar una reelección que a mí me parecería mere...
Hace dos semanas hubo otra acción pública en esa línea. Con la sutileza de elefante en cristalería, se trató de una que urdieron conjuntamente, me parece, la Cámara del Agro, periodistas de extrema derecha y Anabella de León, fundadora del Partido Patriota, exdiputada, Registradora General de la Propiedad, y a quien le traslucen sus ganas por ser la rival de Claudia Paz y Paz en la contienda de 2015 por el MP. Esto, claro, si Paz y Paz decide intentar una reelección que a mí me parecería merecida.
Después de hacerlo en programas radiales ultraconservadores, De León “denunció” en un desayuno informativo en la Cámara del Agro que había una sala de apelaciones en la que tres jueces estaban atentando contra la seguridad jurídica, la propiedad privada, la civilización y la decencia (las últimas dos palabras son mías, pero a alguno se le habrán pasado por la cabeza). Los jueces “atentaban” contra esto porque dieron la razón a comunidades indígenas que reclamaron que se respetara su derecho de propiedad sobre tierras que intentan legalizar desde los años setenta, o que les fueron legalizadas desde la Colonia, y que les usurparon con fraudes en el Registro.
Esta fue la explicación que dio Anabella de León a Plaza Pública sobre su postura en estos casos: “Los propietarios de tierras ya no van a estar seguros de sus inscripciones porque van a venir muchos que van a decir: ‘aquí vivieron mis ancestros’. Esa palabra que utilizan: ‘mis ancestros vivieron aquí’. Y si todos tenemos ancestros mayas, entonces podemos reclamar los montículos de Tikal, Kaminal Juyú. Entonces ¿para qué va a haber Registro?”.
Además de un profundo racismo e ignorancia, me parece que revela que De León quiere posicionarse como la candidata opuesta a Claudia Paz, como quisiera la extrema derecha, alguien “defensora de la propiedad privada” e “implacable con las demandas ilegítimas de los indígenas”. Por cierto, si uno mira los documentos del Registro –evidentemente alterados– nota que los jueces tenían toda la razón al amparar a las comunidades indígenas (respaldadas por Naciones Unidas en este litigio).
Eso de contrastar datos no se le da a medios como Prensa Libre, que convirtió la “denuncia” de De León en portada al día siguiente. Cuando se dieron cuenta de la metida de pata, porque los jueces hicieron ver que el fallo era justo, no lo aclararon. No tengo ninguna certeza sino solo conecto puntos: ¿Será el capítulo dos en la estrategia entre patriotistas, empresarios y medios para “recuperar” una Fiscalía para que regresemos al statu quo de impunidad?
* Publicado en elPeriódico, 3 de diciembre de 2013.
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