Por Victoria Tubín
No obstante, independientemente de esta situación el problema más grave es que no han sido abordadas y por lo menos aclaradas, por lo que la incertidumbre es cada vez mayor en la población votante. Especialmente porque en este país, poco se ha apostado a la formación política de la ciudadanía, todo lo reducen a la emisión del sufragio, lo cual queda muy lejos de ejercer una verdadera ciudadanía. Por lo tanto, muchos y muchas ciudadanas desconocen qué implicaciones tiene votar cómo y por quién, qué implicaciones traería votar y cómo esto tendría sus repercusiones en el Ejecutivo y Legislativo. Las opiniones emitidas por algunos analistas pueden influir en la manipulación de cómo ejercer ese voto. Por ejemplo:
1. Por quién votar y cómo votar: La propuesta de que deberíamos de evitar el voto cruzado, porque el votar cruzado, estaríamos bloqueando las decisiones en el congreso, debido a que las distintas bancadas al no reunir la mayoría calificada para sancionar leyes y ponerse de acuerdo, las políticas públicas y los presupuestos no se aprobarán.
Pero ¿Qué pasa si se elige una aplanadora de cualquier color? Quién garantizará que esa aplanadora represente realmente las necesidades, demandas e incluso sentimientos de la mayoría de ciudadanas y ciudadanos. No sería conveniente emitir un cheque en blanco para que algún partido haga lo que se le venga en gana, y esto tendrá un costo muy alto a la ciudadanía. La historia ha mostrado que los partidos políticos han perdido su ética, al ser ganadores en la Presidencia y Congreso, porque benefician exclusivamente al partido y sus financistas, sacrificando los derechos de la gran mayoría ciudadana.
2. Cómo materializar lo que ofrecen: ¿Por qué se ha posicionado en la agenda mediática y ciudadana/os el tema de la deuda como el gran problema en el gobierno actual?
Vale la pena hacer la reflexión, si el próximo gobierno no hará préstamos para financiar el Presupuesto Público, pero entonces dónde sacará los recursos para la inversión social y demás prioridades del Estado; porque las fuentes de financiamiento del Estado pueden ser básicamente tres y de allí no hay de otra: impuestos, bienes y empresas propias del Estado o préstamos. Entonces por qué no se habla de política fiscal, sino simplemente hay una oposición caprichosa al préstamo público. ¿A caso el Estado tiene bienes o empresas públicas? O ¿Será que los partidos políticos estarán pensando no hablar de pacto fiscal y tampoco quieren endeudar más al país, porque si llegan al gobierno nacionalizaran las empresas que antes ya fueron privatizadas?
Por qué los partidos políticos que según las encuestas van como punteros, han evitado de la agenda mediática éste tema y otros como los procesos judiciales contra militares y ex militares?
En función de lo anterior, será que la ciudadanía ha tomado su tiempo y sentarse para analizar verdaderamente todo lo que está pensando y no se ha tragado la pastilla, como si todo girara alrededor de impedir o presionar para X o Y candidatos queden inscrita/o. ¿Qué prevalecerá en el momento de rayar las boletas al emitir el sufragio? ¿Las emociones o la coacción? Se espera que no, porque el verdadero ejercicio ciudadano debe responder a la fórmula: información- análisis – decisión- información para la auditoría social.
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