Por eso planteamos las preguntas; ¿Cuántas personas necesitamos para transformar Guatemala? ¿Cuántas instituciones necesitamos transformar para transformar Guatemala? ¿Cuáles instituciones necesitamos transformar para transformar Guatemala? ¿Quiénes o cuáles son? ¿Son solo los políticos, empresarios, sindicalistas, profesionales, analfabetas, pobres, ricos, ladinos, indígenas, garífunas?
Como planteaba la semana pasada, lo que estamos buscando es ese o esos puntos de infle...
Por eso planteamos las preguntas; ¿Cuántas personas necesitamos para transformar Guatemala? ¿Cuántas instituciones necesitamos transformar para transformar Guatemala? ¿Cuáles instituciones necesitamos transformar para transformar Guatemala? ¿Quiénes o cuáles son? ¿Son solo los políticos, empresarios, sindicalistas, profesionales, analfabetas, pobres, ricos, ladinos, indígenas, garífunas?
Como planteaba la semana pasada, lo que estamos buscando es ese o esos puntos de inflexión que Guatemala necesita para iniciar y consolidar la transformación de nuestra sociedad. El punto de inflexión no es necesariamente la mitad más uno, o una mayoría abrumadora de las personas. Normalmente en cualquier institución hay personas que ejercen algún tipo de liderazgo. En algunos casos puede ser por carisma, en otros por conocimiento, por su capacidad de convencimiento y en algunos otros por reconocimiento público de la persona. Estas personas que ejercen algún tipo de liderazgo en las instituciones tienen la posibilidad de ser agentes de cambio o de transformación.
Estos potenciales agentes de cambio pueden ser proporcionalmente pocos en una institución, pero pueden lograr, con pequeñas acciones y muchas veces con el ejemplo, una transformación de la institución. No requieren de poder dentro de la institución, simplemente requieren ser agentes de cambio que tienen la capacidad de reorientar una institución. Por eso planteamos la pregunta; ¿Cuántas personas dentro de esa institución necesitamos para transformar la institución? ¿Cuántas y cuáles son esas instituciones?
Cuando revisamos los índices de confianza de las instituciones de la sociedad podemos verificar que las instituciones menos confiables para la sociedad son; los partidos políticos, el Congreso de la República, la PNC, la administración pública en general, la presidencia, el poder judicial, los medios de comunicación, los sindicatos y la empresa privada. Las instituciones que sí cuentan con una confianza mayor al 50% son el ejército, las iglesias, algunas instituciones de servicio (bomberos) o de beneficencia.
No tenemos confianza en las instituciones. Pero las instituciones están conformadas por personas. Lo cual se traduce que en una buena parte no confiamos en las personas que operan en la mayoría de las instituciones de la sociedad. ¿Por qué? Principalmente porque consideramos que las personas están allí para buscar un beneficio propio y no para buscar el bien común. Consideramos que si alguien está en una posición de poder o de autoridad usará esa condición para su beneficio personal, el de su familia, de su organización o su gremio. Es lo que desde Propuesta Urbana hemos identificado como el Síndrome del Hoy-Yo. Esta condición nos dice que las personas actuarán en función de su beneficio en el corto plazo (Hoy) y personal (Yo).
Esto nos lleva a la hipótesis que estamos planteando. Para transformar nuestro país, nuestra sociedad debemos transformar la filosofía, la visión de vida de un número suficiente de personas de ese síndrome del Hoy-Yo y la visión egocéntrica y cortoplacista por una visión integral, comunitaria y de largo plazo. Logrando que un número suficiente de personas transformadas incidan en las instituciones identificadas, lograremos transformar suficientes instituciones para transformar Guatemala.
¿Necesitamos 158 diputados transformados? ¿Cinco magistrados de la CC? ¿Los trece magistrados de la CSJ? ¿Todo el comité ejecutivo del CACIF? ¿Todos los líderes sindicales, obreros, campesinos, estudiantiles, indígenas o empresariales? ¿Todos los ministros, viceministros y directores?
¿Cuántas personas, de cuántas y cuáles instituciones? ¿Cómo nos transformamos y a las instituciones que identifiquemos?
Encontremos juntos la respuesta e iniciemos la transformación de Guatemala. https://www.facebook.com/yoasumoelcompromiso @yoasumo en Twitter.
Dios los bendiga y les recuerdo que toda la gloria, la honra y el honor son siempre para Jesús.
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